Los planteles de las selecciones sub 23 de Paraguay y de la República Dominicana protagonizaron una lamentable batalla campal en el marco de la segunda fecha FIFA que se disputaba en el estadio de La Huerta, en Asunción, y que obligó a suspender el encuentro entre ambos combinados a falta de nueve minutos para el final. Fanáticos se metieron a la cancha para participar de la trifulca.

En lo que debería haber sido un partido amistoso, que de eso tuvo poco, los elencos de Paraguay y de Dominicana llevaron a cabo un partido que debería haber sido preparatorio de cara a los Juegos Olímpicos de París 2024, evento al que ambos seleccionados se encuentran clasificados. A pesar de ello, el clima entre las dos selecciones no era el mejor, dado el resultado del partido anterior, disputado el sábado pasado, en donde el conjunto caribeño se había impuesto por 2 tantos contra cero ante el combinado guaraní.

En esta oportunidad, con un encuentro que marchaba 2 - 1 a favor del equipo dominicano, que había hecho sentir su dominio a lo largo del duelo, el incidente se desató sobre el final del partido cuando el defensor de la República Dominicana Edgar Pujol cortó un incipiente ataque paraguayo, al imponer su cuerpo sobre el de Kevin Parzajuk que al caer, producto golpeó el rostro de su rival con el botín, en un hecho que se convirtió en el disparador de la batalla campal entre ambas selecciones.

El hecho despertó la airada protesta del equipo dominicano, que tras algunos intercambios de palabras se convirtió en empujones y posteriormente en golpes entre los propios jugadores, y también incluyó a los espectadores que saltaron desde las gradas para participar del enfrentamiento a golpes de puño. Además, el lamentable episodio fue filmado por el público y se viralizó en las redes sociales.

De momento, ni la Federación Paraguaya de Fútbol, ni su contraparte dominicana han emitido pronunciaciones sobre el episodio.