Paz en crisis: diálogos entre el Gobierno y el ELN entran en fase crítica

Los diálogos de paz entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Gobierno de Gustavo Petro atraviesan uno de los momentos más críticos desde el inicio de las conversaciones entre ambos bandos. Acusaciones cruzadas, incumplimientos de lo firmado, son algunas de las razones que podrían arrojar por la borda meses de negociaciones entre el grupo armado y las autoridades colombianas.

Por estas horas, el sueño de "Paz Total" de Gustavo Petro, atraviesa horas críticas. Por un lado, la fallida propuesta del Gobierno de intentar viabilizar la propuesta sobre reforma económica que se acordó con el ELN, por el otro, la exigencia de la organización armada acerca de que se retire a la guerrilla de la lista de grupos armados organizados (GAO), una calificación legal que produce efectos en agravar las penas de algunos delitos que se comenten con esas organizaciones.

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Miembros del ELN patrullan el río en el departamento de Chocó, Colombia.

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"Hoy la paz con el ELN vive su mayor crisis. Están congeladas las mesas y el mecanismo de monitoreo y verificación", reconoció el alto comisionado para la Paz, Otty Patiño, en una muestra del estancamiento que sufren los diálogos con la mayor guerrilla activa de Colombia.

El 25 de mayo de este año, las delegaciones del Gobierno y del ELN firmaron un primer acuerdo de 9 puntos en donde se comprometen a iniciar el estudio de una agenda que permitiría avanzar en un acuerdo final de paz. Casi tres meses después, aquel prometedor paso hacia la paz, parece haber quedado en la nada, con los diálogos que penden de un hilo.

Alias Antonio García, comandante en jefe del ELN

A esa situación, debe sumarse que actualmente, la organización armada realiza un paro armado en el departamento del Chocó, en donde cerca de 50 mil personas permanecen confinadas en sus hogares a causa de los enfrentamientos entre el ELN y el Cartel del Golfo, otro de los grupos que el Gobierno quiere sentar en la mesa de negociaciones para lograr un acuerdo de paz.

Actualmente, el cese al fuego bilateral finalizó el pasado 3 de agosto y de momento una renovación del mismo parece cada vez más lejana. Con el retorno de las operaciones militares ofensivas por parte del Gobierno y la continuidad de los secuestros y las extorsiones por parte de la guerrilla, los esfuerzos de paz realizados durante meses se encuentran al borde del abismo, con miles de civiles en el medio, a la expectativa de que la paz por fin llegue a Colombia.