Tragedia en Utah: un niño de 8 años murió tras dispararse en la cabeza

Un niño de 8 años perdió la vida en la ciudad de Lehi, perteneciente al estado norteamericano de Utah, luego de dispararse de manera accidental en la cabeza con un arma que su madre tenía guardada bajo el asiento del vehículo. El hecho reavivó el debate sobre la tenencia y portación de arma de los EE.UU.

La tragedia ocurrió mientras la madre del menor se encontraba dentro de una estación de servicio, a la que había acudido para cargar gasolina. De acuerdo con el testimonio de la mujer, el niño quedó solo en el vehículo, dónde encontró el arma que estaba guardada debajo del asiento del conductor.

Al menos 166 niños menores de 11 años murieron a causa de armas de fuego en lo que va de 2024 en los Estados Unidos.

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"Se disparó, se disparó, se disparó. (...) Encontró el arma debajo de mi asiento y apretó el gatillo. Fue un accidente total", declaró la mujer.

Tras el hecho, en menor fue trasladado de urgencia hacia un hospital local, en donde horas después falleció. Según un informe del departamento de policía de la ciudad de Lehi el disparo fue "involuntario y autoinfligido". De momento se desconoce si se levantarán cargos contra la madre del menor tras el desafortunado episodio.

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Preocupa el uso de armas

Sin embargo, el caso de la ciudad de Lehi, desafortunadamente no es un caso aislado. Los datos brindados por la organización Gun Violence Archive, solamente en lo que va de 2024 más de 11,500 personas han fallecido por la acción de armas de fuego, una escalofriante cifra en la que se destaca que 166 de las víctimas son niños menores de 11 años.

Para tener una dimensión de la problemática que representa la utilización de armas de fuego en la sociedad norteamericana, cabe mencionar que en 2020 las heridas relacionadas a la utilización de armas de fuego superaron a los accidentes de tráfico como la principal causa de muertes de niños y adolescentes en ese país.