Cuba retrasa aumento del 500% en combustibles por "incidente cibernético"

El Gobierno de Miguel Díaz - Canel decidió aplazar este miércoles un aumento del 500% sobre los combustibles, que comenzaría a regir a partir del 1º de febrero, a causa de "un incidente de ciberseguridad" ocasionado por un virus informático que atacó el sistema de comercialización. Las autoridades confirmaron que el esquema de precios vigentes, continuará "hasta nuevo aviso".

La viceprimera ministra de Economía y Planificación, Mildrey Granadillo, comunicó la decisión del gobierno de "aplazar la implementación de una proyección de gobierno vinculada con la actualización de los precios del combustible y su comercialización en una red seleccionada de servicentros a vender en divisas", y apuntó contra la identificación de un virus informático del exterior que demoró el proceso.

Asimismo, la funcionaria manifestó que "la actualización en los precios de los combustibles es necesaria", aunque no comunicó la nueva fecha a partir desde donde comenzaría a regir el nuevo esquema de precios.

Con la aplicación de la medida, el litro de la gasolina pasará de valer 25 pesos cubanos (actualmente) a 132 pesos, es decir una actualización de 107 pesos. En tanto, el litro de gasolina especial se incrementará de 30 a 156 pesos cubanos, suba que alcanza el 520%.

El aumento en el valor de los combustibles forma parte de un ciclo mayor de incrementos en distintos sectores de la economía, como el transporte, y la electricidad, ésta última que se estima que aumente en torno al 25 por ciento. Al respecto, recientemente el mandatario cubano había sostenido que "esas medidas son necesarias e impostergables, porque corrigen profundas distorsiones y desviaciones estructurales que lastran el desempeño de la economía cubana".

Las medidas de ajuste presentadas por el Gobierno como "Plan de Austeridad", intentan salvar a la economía cubana de la profunda crisis que atraviesa hace tiempo, y que la llevó a tener un déficit fiscal que orilla el 20 por ciento y una crisis en el sector energético que obligó a la realización de apagones en cerca del 30% del territorio nacional.