La crisis hidrológica en Paraguay genera un nuevo dolor de cabeza al Gobierno de Peña

El presidente de Paraguay, Santiago Peña, advirtió por la crisis hidrológica "sin precedentes" que atraviesa el país, debido al descenso en el caudal de agua del río Paraguay, la principal arteria fluvial y comercial del país, y alertó por las consecuencias del fenómeno. "Claramente esto va a tener múltiples impactos", aseguró.

"Estamos viviendo una crisis hidrológica que no tiene antecedentes, esto es lo peor de lo peor en 120 años que hay registros", señaló el mandatario durante una conferencia de prensa el viernes pasado. En tanto, según lo adelantado por funcionarios y especialistas, los pronósticos de cara a lo que queda del año no son alentadores e indican que la situación continuaría durante los próximos meses.

El nivel del agua ha retrocedido a niveles alarmantes en la capital paraguayo.

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"Nunca antes había visto una disminución tan prolongada y hoy todos los estudios de pronósticos de lluvia dan cuenta de que esto va a continuar por lo menos hasta fin de año, así que claramente esto tiene múltiples impactos", reconoció el mandatario paraguayo.

La situación en Asunción, lugar del principal puerto del país, es alarmante dado que el nivel del agua se ubicó en -1,36 metros por debajo de su cota mínima. El 1 de septiembre los registros de la Dirección de Meteorología e Hidrología indicaban que el cauce estaba -0,55 metros por debajo de su mínimo.

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El 3 de octubre, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Rolando de Barros, anticipó que la disminución del caudal del río Paraguay "puede llegar a afectar la canasta básica" e impactar también en el precio de los combustibles, ya que el país importa el 100 % de sus hidrocarburos.